Eduardo Linares (Zapopan, Jalisco, México, 1990) vive y trabaja en Guadalajara, Jalisco. Su práctica artística se desarrolla en el cruce entre el misticismo, el ocultismo y la exploración simbólica del cuerpo y el mito. A través de la pintura y la imagen figurativa, Linares investiga los roles de género, el desnudo como acto revelador, y los lenguajes visuales del arquetipo y lo mitológico.

Influenciado por tradiciones esotéricas, la estética modernista y los discursos contemporáneos sobre identidad y poder, su obra propone una narrativa visual donde lo íntimo y lo ritual dialogan. Con un enfoque simbólico y cargado de referencias tanto clásicas como personales, su trabajo se construye como un espacio para la transgresión, la evocación y la contemplación.